La euforia nos hace hacer cosas que a veces tranquilos ni nos pasa por la cabeza, es como una energía super fuerte que nos impulsa hacer desde cosas extraordinarias hasta ridiculeces y estupideces, es una alegría interna que nos hace sentir que vamos a explotar.
Buscamos ideas para estar con esa persona, queremos hacer todo bien hablar hasta mas no poder de dicho tema, en fin nos volvemos locos con la situación que pasa, pero cuando la euforia comienza a marcharse simplemente nos queda el cansancio de todo lo anteriormente realizado.
Cuando esta se va nos damos cuenta que el otro nunca hizo nada fuera de lo normal que todo fue uno mismo, que entrego todo sin importar, porque al final solo queremos que las cosas salgan bien y que la otra persona se lleve "una buena imagen de uno", pero creo que hacemos lo contrario, porque caemos en lo que se llama la intensidad.. por lo que veo una persona intensa aleja a todos los que están a su alrededor, no le veo nada de malo a una persona intensa que se esfuerce y que busque lo que realmente le interesa, o yo tendré el concepto mal definido... Pero una persona intensa es agradable porque te das cuenta que es capaz de mucho por ti, pero ese no es el punto ahora el punto es que la euforia nos hace quedar mal aunque todo lo hayamos hecho bien.
Que hacer cuando sientes que te estas poniendo una persona muy eufórica... nada, espera a ver la balanza de lo que das y de lo que recibes y te darás cuenta que la tuya pesara tanto que tendrás que sostenerla y la del otro solo tendrá migajas.. y en ese momento te comenzaras a decepcionar y dejaras de hacer.
Todos buscan una persona que sea capaz de dedicarle algo, de que le demuestren lo que realmente siente la otra persona, pero cuando lo haces simplemente tienes una palabra que te define y se pronuncia Euforia.
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