Cuando tu no estás!

En busca de la felicidad en mis pensamientos, me tope con uno que es el causante de mis deseos...

Estaba tendida en mi cama pensando en la rutina diaria que iba a tener al siguiente día, cierro los ojos para ver si puedo conciliar el sueño, veo que no puedo y trato de pensar en algo que me haga dormir.

Antes de dormir tengo la manía de pensar en ti, pero esta vez no solo era un pensamiento, era algo que podía sentir desde adentro, que me hacia sentir en un abismo con un fuego inmenso. Trataba de controlarlo pero tu silueta se posaba a mi lado, sintiendo tu cuerpo cálido que me demostraba que de verdad estaba soñando.

Siento que tus besos se posan en mi boca quitándome el aliento, abro un poco los ojos y me doy cuenta que no estas junto a mi cuerpo y que esos besos son alucinaciones por el deseo. ¿Entonces que hago? ¿Como calmo este deseo que con tu silueta entre sueños has provocado? 

Estoy entre el medio de mi sueño y la realidad, ya que no se en cual de los dos es que me pienso quedar.

Me estremezco un poco y sin pensarlo o quererlo siento que mis manos tocan mi cuerpo. Se me ha ocurrido una idea que a pesar de estar ya somnolienta creo que sera algo que me hará sentir bien en ese rato.

Mis manos comienzan a moverse deliberadamente sin ni siquiera tener el control de ellas, mis manos se posan en mi cara, bajando por mi cuello, pecho, hasta que finalmente se posan en mis senos, se sienten firmes y tensos como si estuvieran conteniendo una energía dentro, mis pezones se sienten duros y solo quisiera tener tu boca en ellos, mi cabeza da mucha vueltas en una nube tan suave que me hace subir y bajar, tan cálida, agradable y a la vez tan relajante.

Mis manos van recorriendo mi cuerpo como si tuvieran una fuerza sobre natural, mis dedos se posan en mi abdomen, en mi ombligo que a la vez me produce un cosquilleo. Mis manos descontroladas siguen bajando hacia mi feminidad haciéndome estremecer por la sensación que acabo de presenciar, mis dedos siguen insistiendo en que siga sintiendo y adentrándome al placer que ellos me están ofreciendo, se que estoy despierta, pero mientras tanto no soy capaz de separar mis pestañas, mis ojos siguen cerrados sin tener fuerzas para abrir y ver lo que esta pasando.

Mis dedos van acelerando el ritmo mientras siento la humedad en mis muslos y por ende en ellos, me voy mordiendo los labios para contener los gemidos ya para sustituirlo solo puedo dar un suspiro.

Tu sigues en mis pensamientos controlando como una maquina mis dedos, ellos se dejan guiar de ti, todo el placer que siento lo siento gracias a ti, imaginando que eres tu el que me hace sentir.

Y llega ese momento en donde no aguanto mas, donde tu me has llevado hasta casi hacerme convulsionar, gracias a ti he explotado mi feminidad, toda esta agua que siento ha sido el resultado de explorar cada centímetro de mi cuerpo, porque con un solo pensamiento he sido capaz de  sentir el placer de tenerte aunque tu cuerpo no esta.