viernes, 11 de noviembre de 2016

A tu lado

Odiaba cuando le preguntaba donde estaba, aún con el cosquilleo en sus labios le respondía, que siempre estuvo a su lado. 

"Cómo un amuleto que le regaló alguien en su infancia.
Cómo el número de la suerte que nunca cambia.
Como el mar que se aleja de la orilla y arrastra parte de la arena a su lado.
Aunque no lo creas siempre he estado a tu lado".


viernes, 10 de junio de 2016

¡Un simple saludo!

Estaba él parado, esperando no se que, no le pregunte, no me interesaba, solo me perdí en su mirada y en sus labios que me hacían alucinar.

Me acerqué a saludar escondiendo con una sonrisa todas las perversidades que pasaban por mi cabeza, que sería capaz de hacer en ese momento, no le temería nada, me arriesgaría sin importar que él se quede con mi alma.

Un saludo cálido y un abrazo que duró lo que duran mis labios al producir sonido alguno, pero el tiempo se detuvo ahí, era su piel, su olor, su cuerpo que me hipnotizaba, era el roce de su camisa planchada que me derretía por dentro y me vaporizaba el cuerpo.

¿Cómo estás? Fingiendo las tensiones que estaba sufriendo mi cuerpo en ese momento, eran sus ojos que se me quedaban mirando que hacían que deseara tener dentro todo el deseo que solo él puede poseer.

Se sentía en su voz la lujuria misma de haber sentido mi piel… “con ese perfume me dan deseos de quedarme cerquita, es una maravilla ver como un olor excita y alimenta la llama que siempre se mantiene viva”. Eran esas palabras lo que quería escuchar, para lanzarme a pecar, sin sentir la culpa de que no debía pasar.

Acercamientos para decir un adiós que no queríamos que llegara, roces de mejilla, mis manos que se perdían en su nuca, sus manos que se apoderaban de mi cintura, y sus labios que se encontraban con los míos, era el sabor exquisito del pecado mismo... ¡Con cuantas ganas nos besamos! Eran besos largos, cortos y otros que sencillamente se perdían en los gemidos.

Bailábamos al compás en que nuestros cuerpos se coordinaban para compenetrarse de alguna forma y convertirse en uno, era un baile lento, tranquilo, pasional y exótico… No quiero despegarme, no ahora, no quiero quedarme con las ansias de sentirte de lleno hasta perder la calma, quiero que me penetres y encuentres la razón de mi alma.

martes, 17 de mayo de 2016

Pequeñeces

Te levantas temprano a mirar las pequeñeces que hay a tu alrededor, disfrutas de ellas, te deleitas con el olor embriagador del aire puro en las mañanas... Y te preguntas ¿Qué más se necesita para estar o sentirse feliz?, algunos necesitan la felicidad intermitente en sus vidas para entender que viven, otros sencillamente viven disfrutando de la felicidad que se le presenta en cada momento, sin importar si dura mucho tiempo o solo es como el suspiro que se da cuando te quedas sin aliento alguno.

Miras con delicadeza, asombro y paz todo lo que siempre te ha gustado mirar, es como una caricia suave a esa hora, un abrigo cálido en ese clima perfecto, es como un café caliente en su punto entre lo dulce y amargo, un libro que se vuelve interesante desde el primer párrafo ¿quien tiene el derecho de decir que eso no es felicidad?.

Amistades que duran tanto tiempo que te pierdes en el reloj mismo. Abrazos que dicen la palabra te quiero sin producir sonido alguno y esos recuerdos que dicen te extraño sin nadie escucharlo.

¿No es eso parte de la felicidad en un ser humano?


Y sino lo es, que es lo que falta para si estarlo.

jueves, 12 de mayo de 2016

Irreal

Era irreal, como sacado de un cuento pero no de esos de hadas, sino de esos que te llenan de emoción, lujuria y deseos al leerlo.

Era su mirada que penetraba en la misma oscuridad de sus ojos negros, su voz era como un hipnotizador que le llevaba a su encuentro y que decir de su piel que estaba tan tersa que moldeaba su cuerpo.

Sus manos que agudizaban el placer al momento de tocarla, eran rasposas, nada delicadas pero que no la lastimaban.

Cómo era su pasión al momento de besarla, cerraba sus ojos haciendo que ella se precipitara, es que a veces era ardiente como el fuego y en otras tibio como el sol que resplandece en el ocaso.

Era irreal porque solo se imaginaba su piel contra la suya, sus labios posados en los de ella, sus manos tocando su cuerpo, su mirada viendo su silueta, es que era irreal porque solo vivía en su cabeza.

martes, 19 de abril de 2016

La dama

Era de un color resplandeciente y sutil a la vez, sus ojos posados a los de ella que estaban distanciadamente cerca, era una luz que llenaba de paz sus rostros, eran besos largos y otros cortos, con cuanta gracia los tenía cautivados, es que era única, hermosa  y mostraba su amor descarado, andaba por el mundo presentándose a todos sin sentir ninguna vergüenza sin remordimientos ante sus ojos.

Cuantas veces se pasaron la noche desvelándose para contemplarla, sumidos en la tristeza de no poder alcanzarla.

Era ella la razón por la cual ellos se juntaban, es que sin darse cuenta estaban enamorados de la misma dama.

viernes, 8 de abril de 2016

Cómo instrumento

Cómo instrumento que toca el músico dándole notas a sus letras, así era él, con una voz suave que seducía a cualquiera.

Estaba posado a su izquierda mientras tocaba para ella, eran cortas demostraciones que hacían que ella se humedeciera, cerraba los ojos y pensaba que estaba en otro lugar, quería ser ese instrumento que él acariciaba sin parar.

¡Oh! cuanto he deseado estar en un verso de los tuyos, de esos que digan mi nombre en fracciones de segundos, que nadie lo entienda, que nadie lo sepa, que el deseo mutuo se describa en solo letras. 

Cómo si fuera un instrumento quiero que toques mi cuerpo entero. 





jueves, 7 de abril de 2016

Desconocidos

¡Quiero plasmarte en una hoja de papel!

Cada pensamiento que tengo hace que se erice mi piel... Esa sensación que recorre todo mi cuerpo cuando recuerdo tus labios en mis senos, tu piel junto a la mía, el calor que emanaba nuestros cuerpos vaporizando de una u otra forma la habitación.

¡Que ganas de perder el control tenia con cada caricia que me dabas!, no podía concentrarme porque había perdido la razón, solo quería sentir el cuerpo tuyo sin pensar en el tiempo ni la situación.

Dos desconocidos que estaban de frente en una posición, cadera con cadera, piernas entrelazadas y un deseo mutuo.

¡Con cuantas ganas me he quedado!, el instinto me falló, besos que han quedado en desventaja, y un orgasmo que no concluyó.

Tomarte como si solo fueras la única agua que está a mi disposición, disfrutar del clímax contigo aunque seamos dos desconocidos.

Ser la musa para que me toques como si fuera un instrumento, sonidos suaves que terminen en gemidos, que cada embestida sea prueba de las ganas que nos tenemos.


Y es que no solo mi cuerpo quiere sentirte, es que mis labios quieren que los bautices.

viernes, 4 de marzo de 2016

Ódiame


¡Si!, ódiame luego de querer tenerme a tu lado, siente malestar al tenerme cerca de ti, ódiame porque mi corazón no te eligió a ti.

Échame la culpa con todo tu ser, justifícate y di que soy lo peor que hayas podido conocer, saca a relucir la mala influencia que soy, pasé de ser tu droga favorita a ser tu vicio más dañino.

Di que soy culpable por buscar la perfección, moléstate conmigo por no querer estar contigo.

Obvia toda amistad que algún día pudimos llegar a tener, siente nauseas con solo escuchar mi nombre. Hazme sentir mal en las conversaciones, vuélvete un ser despreciable para que te odie, siéntete bien con esa actitud, hazte la víctima que el monstruo aquí no eres tú.

No te culpo porque tienes toda la razón, soy esa persona que destruyó tus sentimientos, no merezco que me quieras ni me tengas consideración, solo te pido que respetes mi decisión.

Es que ódiame por quererte como amigo y no en una relación. Desvalora los momentos que tu y yo vivimos, ódiame con todas tus fuerzas para que descargues todo ese dolor.


Ódiame para que alivies tu corazón. 

viernes, 15 de enero de 2016

Príncipe de ají picante

No eres azul, verde ni púrpura, no tienes caballo, ni siquiera una túnica. . No tienes castillo ni mucho menos un reino, nada de eso es importante solo lo que llevas dentro. Nada perfecto, ni alto, ni bello... ¡ay! Mi dulce príncipe te estás quedando sin pelo.

Ya tu barriga de cerveza se empieza a notar y tu tolerancia a lo estúpido ya está en su final.

Mi dulce príncipe que bebe romo, aquel que no le gustan los apodos ñoños, esa barba varonil que te identifica, detrás de esta el punto débil que te hace cosquillas.

Esos momentos en que te vuelves un ogro y al ratito estás que pareces un oso cariñoso. .


¡Ay! mi dulce príncipe de ají picante, eres el que gobierna este corazón que late.

sábado, 2 de enero de 2016

¡Y te soñé!

Te soñé en el momento en que mi cuerpo estaba en reposo, estando a mi lado como Dios te trajo al mundo, eras un Adán en mi paraíso, el árbol prohibido el pecado cometido. Te veía como si fueras un Adonis, te contemplaba sin importar si era de día o de noche.

Y te soñé cuando mi pecho se calentaba al querer sentir tus dedos, tu boca que recorría todo mi cuerpo, mis piernas que se abrían con solo pensar que podríamos estar haciendo.. Era el momento justo para tenerte completo, te soñé cuando estaba caliente, húmeda y con deseos.

¡Es que con ganas te desee en mis sueños!