Temor!

Tenía sus ojos frente a los suyos, sentía su respiración cerquita, sus manos que acariciaban su cara, ganando el terreno para plantar el beso que podría deducir como todo terminará. 

¡Ay! Qué cobarde te has vuelto,  por qué no das el paso y te acerca a sus labios, por que no lo tomas, es tu única oportunidad,  y un día te lamentaras!.. escuchaba ella en su cabeza lo que le decía su subconsciente. 

Mientras el fijamente la miraba y ella se alejaba, le preguntaba que pasaba, con voz temblorosa decidió responder.

-Y si llego a besarte y me gusta mas de lo que he podido imaginar, y solo sea la condena de algo más que no sucederá, ¿Qué sentiré mañana cuando te vayas?, ¿Qué tal si extraño tus besos?,¿Que haré cuando ya no nos quede el tiempo?, dime, ¿como me acostumbro a no tener lo deseado a mi lado?, por qué arriesgarme a besarte sino te quedaras a mi lado.

Prefiero ser egoísta y lamentarme y estar a la espera de que sucederá, a arriesgarme y torturarme cuando te vayas y no vuelvas más..