Primera vez..

¿Como puede ser que nuestros cuerpos sin conocerse se acomodaron de una vez?  

¿Recuerdas ese día en que nos vimos frente a frente por primera vez?... fue como si nos conociéramos de antaño, besos y abrazos que se sincronizaron, no podíamos ocultar nuestras sonrisas, yo por nerviosismo y tu por picardía. 

Estábamos frente a frente, mirándonos como si a nuestro alrededor no hubiera gente, comenzábamos a hablar y de todo me reía, solamente me salió decirte me encanta tu camisa, tenias que marcharte y yo te acompañaría hasta la salida estábamos tan cerca que hasta tu respiración yo sentía... De repente me besaste y en ese momento sentí como me derretía...

Tus labios encontraron los míos de inmediato, tus manos acariciaban mi cuello mientras me ibas besando, me apretabas junto a ti para que así yo te pudiera mas sentir, me estabas matando con cada movimiento, me sentía encadenada y a la vez libre como el viento, volaba entre nubes y me incendiaba en el infierno. 

Y ahí estábamos los dos entregados en un beso lleno de pasión, preguntándonos en lo mas recóndito de nuestra mente como fue que nos pasó, te ibas despegando lentamente mis ojos entre cerrados te decían a gritos no te detengas que quiero sentirte nuevamente. ¿Se vale repetir? eso fue lo que te dije, te paraste y acomodaste y de la nada otra vez me besaste, que beso que se me ha quedado marcado, la desesperación con el cual no los dábamos, sentíamos que el mundo se estaba acabando y que esa era nuestra ultima oportunidad de besarnos. 

Te apretaba los labios porque no quería dejarte ir, sonreía entre movimientos, tus manos recorrían todo mi cuerpo, yo te acariciaba con timidez y miedo y tu con tu fuerza salvaje me cambiabas y me hacías sentirte mas de lleno, te tocaba con tus manos encima de mis dedos, tu me guiabas mientras seguíamos perdidos en ese beso. 

Y ahí estaba yo con la blusa un poco desarreglada y la humedad en mi pantalón gritándote en el silencio que me tomaras en ese momento, si! era apresurado pero nuestros cuerpos no entendía la razón, solo se sentían atraídos por un beso que levanto la pasión.

Como puede ser que nuestros cuerpos se entendieron tan bien, como puede ser que me volviste adicta a tus besos de una vez, como puede ser que me diste un chin de ti y yo siempre te desee así, como puede ser que me encantaste desde la primera vez en que te vi.