Temor!

Tenía sus ojos frente a los suyos, sentía su respiración cerquita, sus manos que acariciaban su cara, ganando el terreno para plantar el beso que podría deducir como todo terminará. 

¡Ay! Qué cobarde te has vuelto,  por qué no das el paso y te acerca a sus labios, por que no lo tomas, es tu única oportunidad,  y un día te lamentaras!.. escuchaba ella en su cabeza lo que le decía su subconsciente. 

Mientras el fijamente la miraba y ella se alejaba, le preguntaba que pasaba, con voz temblorosa decidió responder.

-Y si llego a besarte y me gusta mas de lo que he podido imaginar, y solo sea la condena de algo más que no sucederá, ¿Qué sentiré mañana cuando te vayas?, ¿Qué tal si extraño tus besos?,¿Que haré cuando ya no nos quede el tiempo?, dime, ¿como me acostumbro a no tener lo deseado a mi lado?, por qué arriesgarme a besarte sino te quedaras a mi lado.

Prefiero ser egoísta y lamentarme y estar a la espera de que sucederá, a arriesgarme y torturarme cuando te vayas y no vuelvas más..

¿Parte de esa vida?, ¡No quiero!.

No quiero ser parte de esa vida. De esa en que la gente vive para morir, en donde los días le pasan por el frente sin emoción y motivación alguna, en la cual respiran por respirar, no quiero ser parte de esa vida en que los demás dejan de amar.

Esa vida en que tienen que preguntar cual es su deber, donde la libertad es un lujo que no todos pueden tener, donde les enseñan a sobrevivir pero no a vivir plenamente, donde el dolor es lo que le demuestra que siguen vivos, mientras la felicidad solo es un mito.

No quiero vivir una vida donde el amor sólo sea una ilusión y aquel que no lo conoce diga que es doloroso para justificar su insensibilidad.

El amor no duele si es puro y sin malicia, sencillamente no quiero vivir esa vida.

Esa vida en que las personas no crean unas a las otras, en que no confían en una amistad.

De esa vida en que el color negro detona muerte y el gris tristeza, donde una sonrisa puede ser fingida y una lágrima una total mentira. 

Sencillamente no quiero vivir esa vida, en que la lluvia sea ácida y el wifi un bienestar, donde las conversaciones se limitan a un chat, donde extrañar a una persona sea solo por fotos, y que un emoticón sea el sinónimo de afecto.

No quiero vivir esa vida.. Esa vida no la quiero.

Cómo si solo fuera sexo..

Quiero hacerte el amor de la forma más vulgar, qué el morbo se apodere de mi cuerpo y la lujuria sea el motor de mis pensamientos.

Quiero tomar tus labios entre los míos, besarte despacito, que tu cuerpo se estremezca mientras te digo al oído que soy tuya completa. .

Gotas de sudor con el olor que emana nuestros cuerpos, esa sed que no se nos quita, ese deseo de seguir húmedos y sedientos.

Gritos que se ahogan por los gemidos de placer, esa forma de tocarnos, ese estilo de amarnos. . Olvida esas ganas escondidas, es que quiero hacerte el amor con todo y sin medidas.

Ver tu cuerpo desnudo debajo de mi cuerpo, sentir cada embestida mientras estás adentro, que tomes mis pechos en tu boca, que lleguemos al universo y así estar fuera de órbita.

Quiero hacerte el amor como si solo fuera sexo.

                                                                        

¡Falsedad!

Era una noche calurosa y no por el clima que azotaba, estaban ellos "hablando" mientras la temperatura seguía en alzas.

¡No lo hagas!.. Le dijo ella en un grito ahogado que solo su ser pudo escuchar, no te acerques a mi sino piensas quedarte, no me digas nada bonito, no intentes enamorarme.

Es que sentía un miedo horrible, él decía que las personas lastiman, ella le susurraba que no lo haría, él justificando decía que le dolía solo de pensar si la perdía, ella siempre supo que esas palabras eran mentiras.

¡No manches esas palabras! ¡No digas que no lo harás!.. No utilices esa arma que dijiste que no ibas a usar.

¡No lo hagas! No te encariñes falsamente ni me encariñes de verdad, no lo hagas si a final de cuentas tú sin importarte te marcharas.

Y esa fue la última noche en la que hablaron con sinceridad.

Es que todo era mentira, una gran falsedad!.